Resumen
La artritis reumatoide es la enfermedad inflamatoria más común en adultos con una alta prevalencia en la población general, invocando para su diagnóstico la presencia de al menos cuatro criterios de los orientados por el Colegio Americano de Reumatología, teniendo un papel protagónico en los últimos años la presencia de anticuerpos anti proteína citrulinada, así como los estudios de imágenes, que ayudan al diagnóstico de la artritis reumatoide temprana en el curso de los dos primeros años de evolución y sus orientaciones terapéuticas adecuadas, aspecto fundamental en la actualidad para evitar las lesiones erosivas irreversibles, que resultan en un marcado compromiso de la calidad de vida de los pacientes que la sufren.
De hecho, el tratamiento temprano es decisivo para el éxito del manejo de este reumatismo. Esta noción de ventana terapéutica está ampliamente respaldada en la literatura. El inicio rápido de un tratamiento eficaz puede facilitar la remisión, la discapacidad funcional limitada y el deterioro estructural. El objetivo del tratamiento es la remisión clínica o al menos baja actividad para cada paciente, para prevenir la progresión estructural y la discapacidad.
El logro de un estado de remisión o un bajo nivel de actividad de la enfermedad conduce a un mejor resultado estructural y funcional a medio y largo plazo y podría reducir el aumento de la mortalidad, particularmente en relación con las enfermedades cardiovasculares.
La remisión debe ser el principal objetivo terapéutico para todos los pacientes, particularmente para la AR temprana. En casos de AR y / o destrucción articular significativa, la remisión es más difícil de lograr y, en este caso, el bajo nivel de actividad representa una alternativa aceptable.
Artículo:
- Artritis reumatoide, diagnóstico, evolución y tratamiento. Autor: Rev Cuba Reumatol vol.21 no.3 La Habana sept.-dic. 2019